Incertidumbre en la campaña presidencial de Estados Unidos

La tardía retirada del actual presidente estadounidense Joe Biden de las elecciones presidenciales marca un hecho inusual en la política de ese país. Aunque el nombre de Kamala Harris es algo que se da por hecho en la escena política estadounidense, eso no significa que la suerte esté echada. Dentro del propio Partido Demócrata Expertos habrá mucho trabajo por hacer para mejorar las intenciones de voto a su favor.

Aunque se especulaba ampliamente, la decisión del mandatario estadounidense y el candidato demócrata tomó al mundo por sorpresa. Incluso sus asesores más cercanos fueron informados un minuto antes de que se publicara su carta al público en su cuenta X, informa The New York Times. La última vez que se registró una situación similar fue hace más de 50 años, cuando Lyndon B. Johnson -que inició la guerra de Vietnam y fue vicepresidente de John F. Kennedy-, se retiró tras un mal inicio de campaña electoral.

Después de que Biden anunciara su retiro, Harris confirmó sus intenciones de encabezar la Casa Blanca y aseguró que intentará ganar la nominación como candidata presidencial del Partido Demócrata. No obstante, la decisión de Biden «no significa una victoria fácil» para Harris, indica el periódico The Washington Post. Algunos demócratas influyentes están considerando la posibilidad de celebrar una «convención abierta» para elegir al candidato presidencial del partido. Si Harris se convierte en la candidata, se enfrentaría a un activo Partido Republicano, que «ya ha intensificado sus ataques contra ella», agrega el medio.

La vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris, fue criticada repetidamente por desaprovechar su «considerable potencial» durante la campaña presidencial de 2019, en la que fracasó como candidata y trató infructuosamente de demostrar su autenticidad, escribe ‘The Washington Post’.

Las encuestas de 2023 mostraron que Harris tenía el índice de aprobación más bajo de cualquier vicepresidente estadounidense en su primer mandato desde Dan Quayle a principios de la década de 1990. Los sondeos mostraron que el índice de aprobación de la 49.a vicepresidenta cayó del 41,7% al 36,3% a principios de 2023.

Encuestas anteriores revelaron que Harris, que ha sido criticada en repetidas ocasiones por hacer la vista gorda ante la crisis migratoria de EEUU y guardar silencio sobre la caótica retirada estadounidense de Afganistán, «no está calificada» o «no está en absoluto calificada» para ser presidenta del país.

Cifras a favor de Trump

Para Monica Hirst, especialista en la política internacional de la Universidad Torquato di Tella y de la Universidad Estatal de Río de Janeiro, la decisión de Biden fue «correcta, pero tardía». “Lamentablemente, la campaña ya está muy adelantada desde el punto de vista de la coyuntura y del posicionamiento de Trump”, señala.

Según las últimas encuestas, tanto Joe Biden —forzado a abandonar la carrera electoral tras exhibir un notorio declive cognitivo en las últimas semanas— y Kamala Harris —favorita para reemplazarlo como abandera demócrata— se encuentran por detrás del candidato republicano y exmandatario Donald Trump en la mayoría de los sondeos.

Además, aunque el nombre de Harris es algo que se da por hecho en la escena política estadounidense, eso no significa que la suerte esté echada. Dentro del propio Partido Demócrata habrá que trabajar mucho, ya que «Harris entra con una situación muy desigual desde el punto de vista de la capacidad de su candidatura», según Hirst, y que «desde el punto de vista de la alineación política, ella y Biden son diferentes», en palabras de Motta. De esta manera, la estrategia de campaña va a necesitar cambios sustanciales.

Mientras tanto, el republicano Donald Trump se impone ante Biden 45% a 43%, el expresidente eleva su intención de voto hasta 47% cuando se enfrenta a Harris, quien también mejora los números del actual mandatario y registra un 45% de voto. Ya antes del intento de magnicidio contra Trump, tanto el presidente de EEUU como Harris estaban detrás de Trump por márgenes de dos puntos entre los votantes registrados, aunque exhibiendo distintos guarismos.

Tras la última encuesta nacional de NBC News, realizada más de una semana después del calamitoso desempeño de Biden en el debate televisivo, se puso en marcha la operación para sacarlo de la fórmula presidencial. Una encuesta nacional de Fox News también había arrojado que Trump tenía una ventaja de 1 punto tanto frente a Biden como Harris entre los votantes registrados, 49% a 48%. Si bien la diferencia se encuentran dentro del margen de error, todas indican que Trump está por delante que los demócratas.

Otros sondeos dan cuenta de un escenario menos ajustado. Una encuesta nacional de CBS News/YouGov entre votantes probables realizada después del atentado contra Trump mostró que el magnate republicano aventajaba a Biden por cinco puntos, 52% a 47%, mientras que mostraba a Harris perdiendo por tres puntos, 51% a 48%. Según encuestas publicadas por el diario The New York Times y realizada por el Siena College, Trump se impone en todos los estados en disputa, claves para ganar el Colegio Electoral que corona al ganador de las elecciones, aunque Harris obtiene una intención de voto de dos puntos por encima de Biden.

Fuente: @sputnik