En un comunicado en conjunto de la Embajada de Estados Unidos y el Gobierno del Paraguay, se reafirmó el compromiso para hacer frente al narcotráfico a través de la cooperación bilateral. En este marco, la Administración para el Control de Drogas de los EE.UU. mantendrá su apoyo a los esfuerzos antinarcóticos en Paraguay. “Esta alianza refuerza los esfuerzos conjuntos para combatir las organizaciones criminales transnacionales y fortalecer la seguridad en la región”, dice un comunicado oficial.
“Estados Unidos espera seguir fortaleciendo nuestra sólida relación bilateral con Paraguay, un socio fundamental en materia de defensa, lucha contra el narcotráfico e infraestructura de TIC”, fue el mensaje que la Secretaría de Estado de los EE.UU. en redes sociales, el 6 de marzo de 2025.
El mismo día, el secretario de Estado norteamericano, Marco Rubio, había mantenido una conversación con el presidente de Paraguay, Santiago Peña, donde lo felicitó por la primera compra en la historia del país a través del Programa de Ventas Militares Extranjeras (FMS). Se trata de un sistema de radares, un paso clave que demuestra la voluntad del gobierno de combatir al tráfico de drogas y armas.
Los gobiernos acordaron mantener la colaboración en este ámbito con la Secretaría Nacional Antidrogas (SENAD) de Paraguay, que permanece como parte de la Unidad de Investigación Sensible (SIU). “La cooperación antinarcóticos entre Paraguay y Estados Unidos es fundamental para desarticular redes del crimen organizado y promover un entorno más seguro para nuestros ciudadanos. Seguiremos trabajando juntos para alcanzar este objetivo”, señalaron representantes de ambos países.
“Esta alianza, basada en la confianza mutua y la colaboración efectiva, demuestra el compromiso de ambas naciones en la lucha contra el narcotráfico y la delincuencia organizada”, finaliza el comunicado conjunto.
La cooperación confirmada de la DEA a Paraguay es producto de un proceso de diálogo iniciado a fines del 2024 entre el gobierno de Paraguay y las nuevas autoridades de los Estados Unidos, con el propósito de fortalecer la cooperación en la lucha contra el crimen organizado.